La falta de personal, que el Ayuntamiento de Torrelavega viene arrastrando desde hace años, se ha agudizado en los últimos meses de forma tan alarmante que está afectando de manera muy grave en prácticamente todos los departamentos municipales.
Es posible que incluso este mes no se pueda celebrar el máximo órgano de decisión municipal, el Pleno, o al menos no se pueda celebrar en tiempo y forma, debido a que no se están pudiendo convocar las comisiones de cada área para dictaminar los asuntos que se acumulan encima de las mesas.
Aunque parezca un tema que no tenga demasiada trascendencia para los vecinos, la realidad es que casi ningún servicio está siendo capaz de absorber las necesidades de tramitación que se generan, de forma que la atención a cualquier vecino que requiera algún trámite, por sencillo que sea, se convierte una odisea. Sin contar con los plazos que se eternizan y dilatan hasta el infinito.
Hemos denunciado en varias ocasiones los problemas que existen en la tramitación de ayudas, que tienen generalmente como origen la falta de personal en los departamentos que deben hacer las tramitaciones. Ayuda que tienen carácter de urgencia y que pierden todo el sentido si se eternizan en el tiempo y no las reciben los colectivos que atraviesan una situación difícil.
A esto se suma que en las últimas semanas hemos visto la marcha del Interventor Municipal o la responsable del Departamento de Patrimonio. Figuras clave en el día a día que hacen que el colapso sea aún mayor, pues no hay dirección y apenas una o dos personas deben hacer el trabajo que deberían llevar a cabo 5 o 6 personas.
La gestión errática de personal que arrastra el Ayuntamiento desde hace años se ha agravado en esta legislatura, con Cecilia Gutiérrez a la cabeza, que ha convertido el área en un completo caos.
Se acumulan los procesos selectivos que no se ejecutan y que han agotado sus bolsas de empleo. Con el Covid como excusa, prácticamente ningún proceso de selección de personal se está desarrollando, con plazas que se plantean con carácter de urgencia y que llevan más de 9 meses sin tener ni siquiera un temario asignado.
Por todos es sabido el ejemplo del proceso selectivo para plazas de conserje que sigue sin terminarse. En su momento podía tener explicación por las dificultades para juntar a los candidatos, pero más de un año después del inicio de la pandemia, hay métodos y sistemas de sobra, como los que están utilizando muchas otras administraciones, para desarrollar esas pruebas o pruebas mucho más complejas y multitudinarias.
Es una cuestión de incapacidad y desidia en la gestión por parte del Equipo de Gobierno. El pasotismo más absoluto. No se aborda ninguna situación de falta de personal con reestructuraciones o acudiendo a excepcionalidades previstas en la Ley, sino que como mucho, se privatizan algunos servicios como ya hemos visto en el caso de los conserjes.
Por supuesto, desde la ACPT no vamos a permitir la privatización de nuestros servicios municipales y hacemos directamente responsable al alcalde que, conocedor de esta grave situación, prefiere mirar para otro lado, como en tantas otras cosas.
Alejandro Pérez, concejal por la ACPT en el Ayuntamiento de Torrelavega
Torrelavega, a 23 de abril de 2021