Una vez que ha finalizado el ejercicio presupuestario del año 2018, es momento de hacer una reflexión sobre la capacidad que tiene el equipo de gobierno PSOE-PRC para ejecutar sus propios presupuestos.

Los datos que a fecha de 2 de enero arroja el estado de situación de los presupuestos es demoledor: tan solo se ha ejecutado un 18,55% de las inversiones aprobadas. De un total de 20 millones de euros que disponían para invertir, solo han realizado inversiones por un total de 3,7 millones.

La cifra del 18,55% está muy lejos del 30% que aseguraba hace unos días Pedro Pérez Noriega, Concejal de Hacienda. Los datos económicos son tozudos y no dejan lugar a interpretaciones.

El PSOE y PRC con la complicidad de Blanca Rosa han dejado de invertir en Torrelavega más de 16 millones de euros este año, a pesar de la grave situación que atraviesa nuestra ciudad. Estamos ante un equipo de gobierno que según ha ido transcurriendo la legislatura, se le ha hecho larga y pesada, donde la falta de capacidad para el día a día ha sido una constante y según han pasado los meses se han ido quedando sin ideas ni proyectos.

Este año tenían que haber sido una realidad el Centro Cívico de Sierrapando, el Centro Cívico de Viérnoles, el área de autocaravanas, el parking en altura, el apuntalamiento y nuevo proyecto del Palacio Municipal, la cubierta del patio del Colegio de Tanos, la cobertura del parque infantil de Nueva Ciudad, la regeneración de los márgenes del río, el plan de asfaltado de Viérnoles, el saneamiento de Villafranca, el vial de Santa Teresa o los nuevos accesos al Barrio Covadonga, por destacar algunos de los proyectos más relevantes.

Cuando un equipo de gobierno no es capaz de invertir anualmente las inversiones que ellos mismos aprueban en su presupuesto, mal pueden ir a exigir ante otras administraciones dinero para que inviertan en la ciudad. Torrelavega no se merece este tipo de gobernantes donde el común denominador de todos ellos, con excepción de muy pocos casos, es la apatía, dejadez y vagancia a la hora de gobernar.

En Torrelavega a 7 de enero de 2019