Manifiesto de ACPT con motivo del 14 de Abril y la concentración por la República 

El 14 de Abril de 1931 se proclamó en el Estado español la II República, que supuso el culmen de los objetivos de muchos, inicio de los sueños de otros tantos, y el escondite y huída de aquellos que temían al pueblo empoderado. En aquella República, con todas sus contradicciones, llegaron a ponerse en marcha muchos proyectos e ilusiones, sobre todo en el gobierno del Frente Popular, que supusieron el mayor intento de establecimiento de un país verdaderamente justo, sin desigualdades, solidario, moderno, culto, demócrata…de toda nuestra historia moderna.

Como siempre pasa con aquellos que intentan subvertir el macabro orden establecido por el cual unos pocos tienen o deben tener la capacidad de subyugar a la mayoría, a las clases populares, aquel intento fue abrupta y sanguinariamente truncado, abocando a Cantabria a uno de los más dramáticos episodios de nuestra historia, como fue el Golpe de Estado fascista y la guerra civil. Una guerra civil ganada por un bando donde se juntaron las derechas tradicionales, las élites económicas, los fascistas italianos y españoles, los carlistas, los nazis alemanes etc. es decir, todo aquello que representa lo más oscuro del pensamiento político del s.XX.

Hoy ser republicanos, es ser militantes de la historia. Los 40 años de genocidio programado y dictadura sanguinaria en nuestro país, y una posterior transición que nos la quieren pintar como modélica, se encargaron de borrar de nuestras vidas, de nuestra conciencia colectiva aquellos ejemplos de resistencia, de defensa de la democracia y de un mundo más justo, de lucha antifranquista, de represión brutal…Hoy ser republicanos es reivindicar por encima de todo, aquellos ejemplos de personas que, en la mayoría de los casos, dieron su vida por la Ciencia, por la Cultura, por la Educación y por un futuro de Justicia Social. Hoy ser republicanos es condenar la farsa de Transición donde las élites políticas y económicas de la dictadura no se movieron ni un ápice de su poltrona, donde el Jefe de Estado fue y sigue siendo bochornosamente heredero directo del Dictador, una monarquía borbónica decadente que da vergüenza, en definitiva, el Régimen del 78 que se tambalea como un gigante herido y que tiene todos sus pilares básicos podridos, que huele que apesta a corrupción, que se ha demostrado no sirve a las necesidades de la mayoría social porque aquellos que lo llevan décadas gestionando han vendido nuestra soberanía, esa herramienta para hacer política por y para el pueblo, al mejor postor. Hoy ser republicano, es construir república en nuestro día a día, es tomar lo mejor de aquellos que en su momento apostaron por ella, su valentía, su arrojo, su virtud profundamente democrática (no nos olvidemos que democracia, esencialmente, implica, redistribuir riqueza, verdadera libertad de comunicación, auténtica participación democrática como la que desde ACPT tratamos de poner en marcha y ejercer cada día…), su oposición al monstruo fascista que en nuestros días se manifiesta con un preocupante racismo campante, su conciencia de clase, su voluntad inquebrantable de tener un futuro que valiera la pena vivir sin desigualdad y donde la solidaridad y la cooperación fueran los ejes fundamentales de las relaciones humanas y con todo ello, construir una III República acorde a las necesidades del pueblo aquí y ahora.

En la Asamblea Ciudadana por Torrelavega tenemos muy claro que en política, cuando se está de verdad para defender los intereses de la mayoría social, las clases populares, hay que mojarse hasta mancharse, tal y como lo hicieron tantos miles defendiendo la legalidad republicana, muchos de los cuales aún hoy siguen en cunetas. Por ello, luchamos por mantener, fomentar y trabajar para forjar un camino entre todos que nos permita construir una verdadera sociedad democrática y participativa, que inevitablemente esa sociedad será… ¡Republicana!

¡¡¡ VIVA LA REPÚBLICA !!!