No entendemos que se contrate a empresas estafadoras de administraciones cuando ya sabía que iba a ser desalojado de la alcaldía

Desde la Asamblea Ciudadana Por Torrelavega queremos denunciar que el pasado día 14 de Enero, día de la víspera de la moción de censura y cuando sabía que sus horas como Alcalde estaban contadas, el Sr. Ildefonso Calderón Ciriza firmase un contrato para el asfaltado de la Avenida de España con la empresa ASFIN una de las empresas pertenecientes al Cartel del Asfalto y que ha sido condenada por estafa e inflar los precios de las obras.

La contratación de esta empresa se produjo con un negociado sin publicidad que consiste en pedir precio a tres empresas y escoger a una de ellas. Curiosamente de las tres empresas a las que se solicitó presupuesto dos de ellas están condenadas por pertenecer al cartel del asfalto (ASFIN y SENOR).

Recordamos que el Ayuntamiento de Torrelavega, otros ayuntamientos de Cantabria, el propio Gobierno Autonómico y quizá el Gobierno del Estado, han tenido que hacer frente a sobrecostes de las obras de asfaltado que la Comisión de la Competencia estima en un 20% durante el período investigado (1.998-2.011) estafando a los Torrelaveguenses varios millones de €.

Este cartel estaba formado por empresas que se dedican a fabricar, vender y ejecutar obras de asfaltado: -ARRUTI -ASCAN -ASFIN -EMILIO BOLADO –SENOR.

Queremos dejar claro que ACPT no pone en duda la necesidad que había de asfaltar la Avda. de España, pero no entendemos por qué el anterior Alcalde continuaba adjudicando obras a las empresas que pertenecían a este Cartel y que se ha demostrado que nos estaban cobrando de más.

En un negociado sin publicidad la ley obliga a tener que pedir precio a tres empresas y por ética tenían que estar descartadas esas 5 empresas, de las cuales curiosamente solo continúan en activo las dos a las que les pedimos precio.

En política los hechos  y las formas también cuentan y no solo se tiene que ser honrado sino parecerlo y con un contrato como el firmado arroja muchas dudas sobre la catadura moral de la persona que lo firmó.

No se puede entender como un representante municipal que debe de velar por los intereses de la ciudadanía, contrata obras con quien ha estafado a decenas de administraciones, entre otras este Ayuntamiento.

El comportamiento de Ildefonso Calderón para el contrato de esta obra, no ha sido ético ni moral y responde como mínimo a una irresponsabilidad total en la gestión de los asuntos públicos.