En respuesta a las reivindicaciones del AMPA y coincidiendo con el 10ª aniversario del Conservatorio de Música de Torrelavega, Ivan Martínez y Javier Polanco, concejal y secretario de ACPT tuvimos la oportunidad de conocer, junto al director y a varias madres y padres de alumnos, las principales reclamaciones de un centro en el que trabajan más de 30 profesores y en el que están matriculados 291 alumnos.

En la visita, pudimos comprobar como la calidad de las instalaciones, el presupuesto y las inversiones que aporta la Consejería de Educación no se corresponden con el gran trabajo que aportan los profesionales del centro, la diversidad de la oferta formativa y la gran progresión que ha experimentado el número de alumnos, que se ha multiplicado por 7 desde la apertura del Centro en 2.004.

El Conservatorio, está emplazado en el antiguo Colegio Manuel Llano, centro que siempre defendimos que tenía que seguir ofreciendo educación preescolar y primaria para el pueblo de Campuzano, pero nuestras demandas (y las de la AAVV de Campuzano) no fueron escuchadas y nunca se apostó decididamente por recuperar el colegio.

La Consejería se inclinó porque el edificio sirviera de sede para el Conservatorio, hecho que a nuestro juicio supuso un error que alumn@s y profesores del centro tienen que pagar ahora. Desde el punto de vista arquitectónico, el edificio fue diseñado para albergar un colegio público y no un conservatorio, ello repercute negativamente en la calidad de la enseñanza de música, pues los espacios son inadecuados en dimensión, se han hecho divisiones e insonorizaciones tanto de paredes como de suelos que son insuficientes y el número de alumnos crece tanto que la situación del centro es ya de saturación.

El máximo exponente de ello es la sala en la que se realizan conciertos, audiciones y ensayos de la orquesta, claramente insuficiente en capacidad y disposición para albergar los conciertos, que cada vez que se realizan desbordan el aforo disponible. Este problema se verá agravado en breve plazo, ya que se espera que en unos meses la orquesta pueda rozar el medio centenar de músicos.

Otras de las problemáticas que presenta el edificio es la inexistencia de un montacargas para trasladar los instrumentos, pues muchos son de gran volumen y no pueden ser trasladados por los niños, además de la no adaptación a las personas con movilidad reducida (PMRs) y de la escasez de amplitud y equipamiento (Falta de ordenadores) de las salas de estudio.

En relación a la accesibilidad al centro, el AMPA nos trasladó que es clamorosa la falta de aceras, señalización y pasos de cebra seguros para acceder al centro, que además utiliza el antiguo patio del colegio como aparcamiento.

En definitiva, la visita, que duró 1h 30′ fue muy positiva y llegamos a la conclusión de que disponemos en Torrelavega de un centro de enseñanza pública de música cuyo gran potencial está nítidamente desaprovechado, que es además de un foco cultural un elemento de dinamización económica del  entorno en el que se halla pero que está muy maltratado y arrinconado por la Consejería de Educación. Tenemos claro, que el futuro del centro pasa por la búsqueda de un terreno en la que construir un edificio que responda a las necesidades técnicas y prácticas del funcionamiento diario del Conservatorio que plantean padres, alumnos y profesores, contando con un auditorio con capacidad y equipamiento técnico suficientes y que responda a las previsiones de crecimiento, además de la incorporación en un mismo centro de artes escénicas, de otras manifestaciones artísticas como la danza, el circo ó el teatro.